jueves, 19 de enero de 2012

En verdad te creí perdido

Tenía un rato sin escribir palabra en estos Diarios. La razón no fueron falta de ganas, sino el bloqueo de blogger, o más bien de mi cerebro que se negó a recordar el correo y los 12 caracteres de mi contraseña. Y como chiste, sí, como broma, quería ingresar a mi nuevo blog y la memoria me jugó una broma, regresé aquí, a estos Diarios y siento una extraña felicidad por haberlos recuperado. Que viva la palabra, la tristeza o la alegría, o cualquiera que fuese el estado de ánimo que acompañe a estas necias, perdidas y reencontradas palabras. Gracias a quienes se han dado el tiempo de leerme de vez en vez y hacer algún comentario.